Monseñor Herrera, por más de 25 años fue vicario general, administrador de la diócesis de Concepción, creador y fundador del Centro Universitario Concepción de la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino, párroco de la iglesia catedral y de las parroquias de Aguilares, Santa Ana y Monteros.
El 5 de diciembre de 1997, el papa San Juan Pablo II lo distinguió con el título pontificio de Protonotario Apostólico Supernumerario, adhiriéndolo a la Familia Pontificia y dándole el tratamiento de "monseñor".